Los vehículos actualmente están muy sujetos al ahorro y a la preservación de la funcionalidad del motor. Según las características del automóvil, existe una forma especial de encenderlo y de manearlos para sacarles el máximo provecho. Unos consejos para realizar una conducción eficiente engloban aspectos como la aceleración, el arranque, la deceleración, entre otros.
Arranque y conducción eficiente
El arranque es la primera fase de manejo de los vehículos, uno de los consejos para realizar una conducción eficiente es arrancar el motor de manera eficiente. Para ello, se debe encenderlo sin pisar el acelerador; si el vehículo es a gasolina, se puede iniciar la conducción de inmediato, sin embargo, para los motores diésel, es recomendable esperar unos minutos antes de conducir.
Para el caso de los automóviles sincrónicos, se recomienda cambiar al segundo cambio luego de 2 segundos o 6 metros de marcha aproximadamente. Luego de esto, se debe mantener un criterio de intercambio de marchas según la velocidad o número de revoluciones. Hay diferencias de criterio entre motores de gasolina y diésel:
- Para motores de gasolina, se recomienda hacer cambio de marcha entre 2000 y 2500 revoluciones por minuto. Esta regla es fácil de seguir, sin embargo, si prefieres guiarte por velocidad, pasa a la segunda marcha luego de recorrer 6 metros, a la tercera marcha a los 30 km/h, a la cuarta a los 40 Km/h y a la 5 a los 50 Km/h. Luego de realizar el cambio de marcha, debes acelerar.
- Para los motores diésel, se recomienda hacer cambio de marcha entre 1500 y 2500 revoluciones por minuto. Si prefieres la regla del kilometraje, es idéntica a la de motores de gasolina.
Pese a que esto es únicamente una referencia, es bueno saber que los autos sincrónicos a marchas altas, pero a bajas revoluciones consumen menos cantidad de combustible. Así, por ejemplo, un auto a 60 km/h con motor de 1,2 litros, consume poco más de 7 litros de gasolina si está en tercera marcha; en cuarta marcha consume 11% menos y en 5 marcha un 15% menos. Con datos como estos podemos hacer que las reglas de las marchas sean más dinámicas.
Cuando haya que acelerar o desacelerar, lo recomendable es hacerlo de la manera más uniforme posible; las aceleraciones muy repentinas pueden causar un sobregasto de combustible innecesario. La desaceleración también debe ser poco a poco y no de forma súbita, y tardando el cambio de marcha tanto como sea posible.
Si las paradas que vas a realizar van a durar más de un minuto, lo recomendable es apagar el automóvil, pues el gasto de combustible que se gasta en mantenerlo estacionado y encendido, será mayor que el que se usa al encender el motor.
No olvides cualquier medida de seguridad que puedas adoptar; la predicción es una de ellas pues te permite adelantarte a posibles incidentes y de decidir sobre el ritmo de tu motor. Debe de haber equilibrio con las reglas de seguridad vial y los consejos para cuidar tu motor y su consumo.